lunes, 30 de agosto de 2010

Lupita.

Me cocino al calor del cristal con que me miras.

viernes, 27 de agosto de 2010

Pesares de un gusano.

No es muy grato nacer con alas cuando se tiene alma de gusano.

martes, 24 de agosto de 2010

Beatífica.

Solo a tu lado salgo en los espejos.

lunes, 16 de agosto de 2010

Del imsomnio y otros demonios.

Han vuelto tus mejillas, y con ellas, yo, a gozar del insomnio y de otros demonios, predicadores luminosos de tu sonrisa. Aún así le rezo a tus dioses y a los mios para que me libren del delirio.

miércoles, 11 de agosto de 2010

Quieto.

Quieto, por el miedo de dar un paso y que el aire se desmorone sobre mi cuerpo.

lunes, 9 de agosto de 2010

El día del señor.

Al final de su día, el señor de esta casa volverá sus ojos confundidos entre tanto crujir de diente, ente tanto canto a su nombre, entre tanta ropa rasgada, entre tanto mar ensorberbecido.
Volverá y recordará nuevamente la barca que hace tanto y tan poco navegó sobre su ira. Recordará y llorará fuego sobre sus propias manos. Llorará e inventariará lo bello que ha sido, lo que ya no es.


Al final de su día; el señor del ejercito, del amor, el señor de tantas cosas, de tanta contradicción; pensará en las mañana y las tardes de aquella prometedora semana.
Pensará y recordará que todo le pareció bueno incluso la noche que ahora le pesa en las espaldas.

Al final de su día renegará de su celo, de su eternidad. Renegará y buscará un cielo mas allá de su cielo; un cielo más grande, mas celeste; contra el que pueda blasfemar.


viernes, 6 de agosto de 2010

Angustia. ("Vienes con el sol")

Devoro las garras que la noche planta en mi pecho mientras pienso y despienso si vendras, pese a mi, con el sol.

martes, 3 de agosto de 2010

Gravedad.

Vienes a mostrarme las cadenas que te libran de mi cielo.

lunes, 2 de agosto de 2010

Encumbrado.

En la cumbre de los años hube de elegir entre ser tuyo y todo eso o ser apenas poeta y nada más. Y, ya ves, aquí estoy cantándole de espaldas a tu ausencia.